Acercamiento a Sísifo
Ascenso obligado en el malestar del acaso día, rumores de la drástica porfía, lo comenzado como una despedida, una parada y el número inscrito para la identificación a lo lejos en la distancia, el espacio sabe contraer destino y el tiempo su peor designio. La vibración hace de la costumbre un aquí constante, a veces se olvidan los caminos que trajeron este itinerario de veces que es la vida, frágil como un impulso de todos los días, con un rostro que es apenas la huella de lo anterior y lo posible en la diáfana reconciliación de un instante que pretende ser memoria, confundir la desgana con la inercial costumbre, a caso el sin sentido de estar vivo en la eterna pendiente a donde los días se acercan a la roca mortal de un castigo, en el planteo franco de una mirada es intentar subir con el peso impuesto hasta quien sabe cuando, rodar entre sudor y tensión, en un exigir de huesos y profundas respiraciones. El esfuerzo es estar vivo con sentido, no querer creer en los ayeres